Una foto de una mujer en el fondo de un túnel oscuro. Esa fue la “evidencia” que vio Pedro, que le bastó para deducir que Laura no está pasando por un buen momento.

Pero ¿en serio? El abogado fue directo a la tina donde se bañaba su exmujer, para ir a “contenerla”. Pero ella no se siente mal y él insiste en ser su terapeuta, diciéndole que está deprimida y no lo quiere reconocer. ¿Hasta cuándo, Pedro?